CREACIÓN LITERARIA

PROSA: BINOMIO FANTÁSTICO (Gianni Rodari)  

A partir de dos palabras sin relación aparente (ej. luz y cartera) se inventa una historia. Pero ojo, hay que echarle mucha imaginación. 

-Río y biblioteca 

Cuenta la leyenda, que hace cientos de años, en un insólito lugar, habitaba una tribu llamada los Lequitorums.  

Los Lequitorums, eran unos pequeños seres que nunca se dejaban ver y vivían encerrados en un templo gigante que construyeron sus antepasados. Lo único que se conocía de estos extraños hombrecillos era que cada luna llena el río que atravesaba su templo se llenaba de letras de todo tipo, mayúsculas, minúsculas, más grandes, más pequeñas, letras chinas, griegas y de todas las formas y colores que nos podamos imaginar. El río se volvía precioso, las letras surcaban su cauce como peces que se dejan llevar por la corriente, pero lamentablemente nadie sabía por qué pasaba.  

Un día un grupo de niños muy curiosos, que no podían seguir viendo estos acontecimientos sin intentar descubrir por qué ocurrían, se adentraron en el templo. Estaba muy oscuro, con pasillos pequeños y angostos, telas de arañas por todas las paredes y zonas por las que casi no se podía respirar. Cuando la fatiga se hacía insufrible, uno de ellos decidió sentarse, dando la casualidad, que el asiento que eligió era un interruptor que les llevaba directamente ante los Lequitorums. No daban crédito de lo que veían, todo el templo era una enorme biblioteca, la más grande que jamás habían visto y de lado a lado la cruzaba un río, el río que ellos conocían.  

Desde aquel momento dieron respuesta a todas sus preguntas y nunca más volvieron a molestar a esta maravillosa tribu. 

VERSO: ENCADENAMIENTO  

Encadenar frases es de lo más sencillo: la segunda comienza con la palabra con la que terminó la primera. Encadenar versos es igual de sencillo si entendéis por verso una oración acabada en punto. Y recordad: olvidaos de la rima. 

Mi madre me prestó dos monedas. 

Con las dos monedas me fui al mercado. 

En el mercado me compre un cordón. 

Con el cordón hice un lazo. 

Gracias al lazo ayude a un señor. 

El señor me dio una flor. 

La flor se la regale a mi madre. 

  

  

DRAMÁTICO: HIPÓTESIS ABSURDA (Gianni Rodari) 

¿Qué ocurriría si las plantas, una mañana, comenzasen a hablar? Inventad nuevas hipótesis absurdas y haced la historia correspondiente: 

Narrador: Carlos era un niño de 10 años que como todas las mañanas a las 9 estaba a punto de levantarse. 

Carlos: Oh que día más bonito hace, los pájaros cantan, el cielo es azul y... Aaah ¿qué me ha pasado? ¿por qué tengo las manos donde los pies y los pies donde las manos? Mamaaaaaaaaaá. 

Madre: ¿Qué pasa hijo? ¿A qué vienen esos gritos ya desde primera hora de la mañana? 

Carlos: ¡Mira lo que me ha pasado! 

Madre: Aaaaaah pero Carlitos, hijo. ¿Cómo te ha podido ocurrir eso? Vamos ahora mismo al médico. 

Carlos: ¡No es tan fácil! ¿Crees que puedo moverme? Cada vez que intento andar me caigo al suelo. 

Madre: Vamos a llamar a tu padre y que te meta en el coche, que nos vamos pitando. Javierrrrrrrrrrrrrrr ven a la habitación del niño. 

Padre: Mmmmm qué pasa, todavía estaba durmiendo. 

Madre: Mira las manos y los pies de tu hijo. Bueno los pies y las manos, las manos y los pies ay dios tú mírale y punto. 

Padre: Y para esto me levantáis. Le habrá pasado por quedarse viendo la tele en el sofá y desear que sus pies fueran manos para llegar al mando, o no es así Carlitos. 

Carlos: Uy pues tienes razón. 

Padre: No te preocupes, luego te echas la siesta deseando que todo vuelva a la normalidad y punto. 

Narrador: Pero Carlitos tardó una eternidad hasta que dio con el sueño que deseaba. Siempre pensaba en tener el culo más grande para que el sofá no se le clavara, los ojos minúsculos para que no le molestara la luz, unas manos con muchísimos dedos para coger más palomitas y ese tipo de cosas que son útiles pero quedan un poco extrañas cuando sales a la calle.